El estado de las carreteras en Grecia a su entrada en la CEE era francamente mejorable. Décadas de guerras y gobiernos dictatoriales habían dejado las infraestructuras del país en un estado paupérrimo. Haciendo un breve resumen, el país debió hacer frente a lo largo del siglo XX a un golpe de estado en 1909, dos guerras balcánicas, la división del país entre partidarios de Venizelos y partidarios del Rey, con dos gobiernos de facto, en Atenas y en Salónica, la I Guerra Mundial, la guerra greco-turca, el desastre de Asia Menor, con resultado de mas de un millón de griegos desplazados desde Turquía a una Grecia que contaba entonces con 4 millones de habitantes, la dictadura de Metaxás, la guerra italo-griega, la invasión alemana, cinco años de guerra civil y siete años más de dictadura, hasta 1974.
Esta claro que el país tenía entonces otras prioridades.
En 1985 Grecia contaba tan solo con algo que pudiera llamarse "autopista": la carretera de Atenas a Salónica. Tenía solo dos carriles por sentido, no contaba con un solo túnel y serpenteaba rodeando montañas y desfiladeros. Muy bonito para los turistas que podían atravesar las Termópilas o deleitarse con las vistas del monte Olimpo, pero poco práctico para los camiones e imposible para tráilers de gran tonelaje. El resto de las carreteras dejaban mucho que desear. Una de las consecuencias del estado de las carreteras era el porcentaje de muertos por accidentes de tráfico, que era y sigue siendo uno de los mas altos de Europa (Según datos de la UE). Otra era unos costes de transporte más elevados que asfixiaban la economía del país.
Una vez dentro de la CEE Grecia obtuvo subvenciones para la mejora de su eje principal. Así durante la década de los noventa asistimos a la conversión de la A1 (Patras-Atenas-Salónica-Frontera Búlgara) en una verdadera autopista, con la construcción de túneles y puentes, la creación de nuevos carriles y la mejora del trazado, reduciendo los tiempos de viaje sensiblemente.
La situación permaneció invariable durante casi una década, hasta que la Unión Europea decidió llevar a cabo un ambicioso plan de mejora de infraestructuras, formando parte Grecia del Orient/East-Med corridor. El objetivo de este programa es convertir a Grecia en un punto de conexion multimodal creando una moderna red de autopistas basada en tres autopistas principales: la A1 (Patras-Atenas-Salónica-Frontera búlgara), la Vía Egnatía (Puerto de Igumenitsa-Ioánnina-Salónica-Frontera Turca) y la Vía Jónica (Frontera Albanesa-Ioánnina-Patras).
El principal problema para la realización de este proyecto era cruzar el Golfo de Corinto. Para ello era necesario construir el segundo puente mas largo de Europa sobre una falla tectónica y que este fuera capaz de soportar sin colapsar terremotos de alta intensidad y tsunamis. Este puente, llamado Rio-Antírio fue terminado en 2004. En un futuro debería formar parte de la Vía Jónica y unir el segundo y el tercer puerto mas importantes de Grecia (Patras e Igumenitsa), pero en la actualidad muchos griegos critican que ese puente "une la nada con la nada absoluta".
El tercer gran proyecto concerniente a la mejora del transporte por carretera fue la Vía Egnatía. Aquí la ingeniería tuvo que enfrentarse al problema que suponía la orografía del país. Así, mientras la parte oriental, entre Salónica y la Frontera Turca estaba abierta en 2008, uniendo de esta forma los puertos de Salónica, Kavala y Alexandrúpolis con las ciudad de Estambul y mejorando sensiblemente los tiempos de viaje y la economía de la zona, una de las mas deprimidas de Grecia, aún hay tramos en obras en la parte occidental, que atraviesa los montes Pindo y cuenta con 73 túneles y 177 grandes puentes. la Vía Egnatía forma parte de la Ruta Europea E90 que va de Lisboa a Turquía. Es hasta la fecha la mayor autopista del país, conectando cuatro puertos y tres aeropuertos asi como Italia con Turquía, contribuyendo a dinamizar la economía del norte del país, especialmente la de Salónica y la de Igumenitsa, los dos nudos de comunicaciones mas importantes de la región. La Vía Egnatía fue inaugurada en 2014
El cuarto y último gran proyecto que se acomete es la construcción de la Vía Jónica (Patras-Ioánnina-Frontera Albanesa), que forma parte de la Red Europea E55, dando por fin sentido a la existencia del puente Río-Antírio. Las obras empezaron en 2007, si bien la crisis económica ha ido retrasando la fecha de inauguración, prevista para 2017. Es una obra de gran importancia para la región occidental del país, muy deprimida, basada principalmente en la exportación de productos agrarios y con un importante déficit de infraestructuras que encarece sus costes de exportación. En la actualidad existen algunos tramos abiertos entre Agrinio y Mesolóngi y a la altura de Arta pero la mayoría del trazado está en obras. La conexión entre Mesolóngi y Antírio, donde empieza el puente, es la mas problemática en la actualidad, ya que sus curvas muy cerradas dificultan, si no imposibilitan, la circulación de grandes camiones.
(En verde, los tramos abiertos al público. En rojo, los tramos en obras. En línea discontinua, los tramos en proyecto)
Con la culminación de estos tres grandes proyectos Grecia ganará en competitividad y se colocará de nuevo en el centro de la logística europea, excepción hecha de su red de transporte ferroviario. Pero esa es otra historia que otro día os contaré. Saludos, amantes de la logística:
Luis David Gordillo Paz (AKA Cavafis).
Fuentes:
Diversos artículos de ypodomes.com:
http://www.ypodomes.com/
Artículos de prensa y conversaciones mantenidas los últimos cinco años
Diversos viajes por carreteras griegas entre 2007 y 2014.
No dejéis de leer un poco más sobre el puente de Río-Antírio que menciona nuestro compañero, una obra arquitectónica de referencia mundial debido a sus características, lo que representa y las condiciones adversas bajo las que fue construido.
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