domingo, 5 de abril de 2015

«Cuando Navarra perdió el tren», por Iosu Iribarren López

 


«Cuando Navarra perdió el tren»

por Iosu Iribarren López

Será que estamos algo más sensibles en época de exámenes, o que con tal de no estudiar nos leemos hasta los anuncios clasificados del periódico. Pero ni aún así conseguimos librarnos del transporte y la logística...

 

 Voy en el tren a Madrid, después de una semana en casa, releyendo un reportaje en la edición impresa del Diario de Navarra que me ha encantado y que explica (con algo de resquemor hacia los guipuzcoanos) por qué el tren a Francia pasa por Irún, y no por la capital del Reino. ¿Será una maldición? Según Jaime Ignacio del Burgo, autor del artículo que nos ocupa, Navarra ha perdido en tres ocasiones la oportunidad de tener un papel destacado en la conexión ferroviaria con Europa. Os hago un resumen:


1858.- Ya en el siglo XIX, «los gobiernos liberales tomaron una decisión que marginó a Navarra de este medio de transporte sin el cual la Revolución Industrial no hubiera sido posible. (Por aquel entonces) había dos opciones en liza a la hora de fijar el trazado del revolucionario medio de comunicación desde Madrid a la frontera francesa. O llegar hasta Irún, por Valladolid, Burgos y Vitoria, o hacerlo por Soria y Pamplona, para traspasar la frontera francesa por los Alduides y enlazar en Bayona con la red francesa.»

¿Qué opción se impuso? Ya lo sabemos. También se eligió un ancho de vía que daría que hablar... Pero la opción de Irún no era claramente superior desde el punto de vista técnico y financiero. Al parecer, «vascongados y navarros, enfrentados entre sí, libraron una dura batalla en Madrid y también en París (...) El ayuntamiento de San Sebastián, en un memorial dirigido a la reina Isabel II, calificana de "pretensiones antinacionales" y de gestiones "bastardas" las realizadas por la Diputación Foral, que según los donostiarras formaban parte de un "vastísimo plan" de "conspiración contra la prosperidad nacional"». Al final, las circunstancias políticas dejarían a Navarra sin el silbido y el traqueteo del tren durante algún tiempo.


1914-1975.- «En 1864 se inauguró solemnemente en San Sebastián la línea Madrid-Irún. A pesar de ello, las Diputaciones navarras no se dieron por vencidas.» A lo largo del siglo XX se presentarían varias ocasiones propicias; en 1914 la Diputación en pleno se trasladó a Madrid y consiguió audiencia con el rey Alfonso XIII. Por fin, parecía, Navarra aparecería en el mapa del tren español. Pero en 1975 Navarra seguía insistiendo a las altas instancias en Madrid para que se apoyara la construcción de una nueva conexión con Francia.



Actualidad.- «Cuando el AVE comenzó a extenderse por España, Navarra no quiso perder el tren.» Pero con la crisis todo está parado, y lo que en un principio iba a operar desde este 2015 (Pamplona-Zaragoza y Pamplona- Y griega vasca) tardará en echar a andar.


«El AVE: ¿otro sueño frustrado?» Mientras tanto yo sigo montado en el tren, camino a Madrid. Desde Pamplona.


      *Jaime Ignacio del Burgo es Académico correspondiente de las Reales Academias
de la Historia, de Ciencias Morales y Políticas, y de Jurisprudencia y Legislación.






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