¿Puede convertirse la Región de Murcia en uno de los
principales nudos logísticos de España? Un informe de Proexport dice que es
posible, ya que gracias a su situación estratégica en el Corredor Mediterráneo y
al potente sector agroalimentario,
podría competir con otros grandes centros de distribución de Francia, Holanda y
Alemania.
Para ello, Juan Marín (presidente de Proexport) ha
presentado un informe en el que se detalla la estrategia a seguir, y que
pasaría por desarrollar los siguientes aspectos:
- Potenciar el transporte por vía aérea, marítima y terrestre
- Crear zonas intermodales especializadas en los transportes en frío
- Negociar convenios con las grandes navieras para incrementar el tráfico en el Puerto de Cartagena
- Establecer una terminal de carga en el aeropuerto de Corvera con vuelos directos a los mercados de destino
Estas acciones no solo beneficiarían a la Región de Murcia,
sino a toda el área formada por Murcia, Alicante, Almería y Albacete, desde
donde se despachan cada semana más de 5.500 camiones frigoríficos con productos
agroalimentarios destinados al resto de Europa (la mitad desde la Región).
De aquí la importancia de apostar por el Corredor Mediterráneo de
mercancías, que permitiría enviar por ferrocarril gran parte de estas
mercancías, estimándose que cada semana podrían salir 70 trenes de 750 metros
de longitud con productos agroalimentarios, e incluso llegar a 143 si se sumaran
las provincias limítrofes.
Por estos motivos, los empresarios exigen rapidez para las
obras del Corredor, empezando por la conexión entre Almería y Murcia, y desde
Murcia con Alicante.
Ferrmed, la asociación que quiere impulsar el Gran Eje
Ferroviario de mercancías Escandinavia-Rin-Ródano-Mediterráneo Occidental, cree
que la Región de Murcia posee un enorme potencial, sin embargo el eje
ferroviario para los trenes de mercancías que conecta con las redes
transeuropeas de transportes parece que acabará en Monforte del Cid, dejando
fuera a la región y el resto de territorios más al sur.
A diferencia de lo que ocurrirá en la Comunidad Valenciana y
Cataluña, el Ministerio de Fomento no tiene previsto montar una vía específica
para Murcia, lo que obligaría a compartir vías como hasta ahora, penalizando
enormemente la capacidad de transporte.
Al retraso en los plazos de las obras del corredor en las
zonas de Cataluña y Comunidad Valenciana, hay que sumar un diseño de la red que
poco favorece a la Región de Murcia y Andalucía, con una instalación de segunda
clase y sin las prestaciones que tiene el resto de la línea.
El mayor problema se presenta en el tramo entre Albatera y
Elche, con una fuerte pendiente que hace casi imposible que puedan circular los
trenes de mercancías. Por otra parte, obligaría a estos mismos a atravesar el
tramo urbano semisoterrado de Orihuela, pese a las recomendaciones de seguridad
para que haya vías específicas para los mercancías.
La primera alternativa planteada por el Ministerio y Adif,
es que los trenes se desvíen por Alicante cruzando parte del casco urbano de
esta ciudad, por lo que no se solucionaría el problema de seguridad y se haría
un rodeo innecesario.
La segunda alternativa es que los trenes de mercancías sigan
circulando por la línea Cartagena-Chinchilla, como hacen ahora, y que conecten
en Albacete con el Corredor en dirección a Valencia. Esto supone un retraso de
tiempo todavía mayor, más kilómetros recorridos y mayor coste. Además, esta
línea tendría que ser adaptada al ancho internacional.
Conclusiones:
Las expectativas para la Región de Murcia no son muy
alentadoras, y todo parece indicar que el corredor será en todo caso de segunda
clase, sin las prestaciones del resto de la línea, y mucho más ineficiente. Las
presiones políticas son insuficientes, y el Ministerio permanece impasible ante
las peticiones de los empresarios de las zonas afectadas. Quizás esta sea otra
oportunidad perdida para ponerse a la altura del resto de Europa, dejando el
Corredor Mediterráneo, y al sur español, a mitad de camino.
Mariano José Guillén Paredes. Grupo D1
Fuentes:
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