Hipsteeps
es una exitosa marca de gafas de sol, cuyo negocio principal está en la venta a
través de Internet. Miguel G. el fundador y CEO, es también el encargado del almacén,
y quien se ocupa de la recepción de pedidos, el picking, el embalaje y la carga
de los envíos. Cuando Miguel se marcha de viaje, se permite delegar estas
vitales funciones en alguno de sus solícitos hermanos.
Hasta ahora,
el volumen de pedidos que recibe le permite gestionar su logística de forma
rudimentaria: en una esquina de su cuarto tiene apiladas varias cajas de donde
va sacando los modelos que tiene que enviar. De la entrega al destinatario
final se encarga una empresa de mensajería que ha de recoger una media de nueve
paquetes diarios.
Pero, ¿qué
sucedería si Miguel, decidiera aumentar la inversión en su negocio y se
multiplicara el número de pedidos? Probablemente tendría que plantearse un cambio
en su sistema logístico, basándose en las necesidades específicas de su
empresa.
En
primer lugar, Miguel es muy consciente de que su cliente es muy exigente en cuanto
al tiempo que tarda en llegar su compra, y que este llegue en condiciones
óptimas. Por otra parte, puesto que el envío es una de las pocas oportunidades
de establecer contacto en el mundo físico con su cliente, sabe también que los
detalles son muy importantes, y suele y adjuntar tarjetas, mensajes o pegatinas,
además de ser extremadamente cuidadoso con el embalaje. Otra peculiaridad de su
negocio es que se enfrenta a pedidos individuales, por lo que la preparación de
los mismos es costosa. Finalmente, puesto que la demanda de gafas de sol es
claramente estacional, el espacio de almacenaje que necesita es muy variable: en verano, es él quien ocupa
una pequeña esquina de su cuarto, frente a una invasión temporal de cajas.
Como
Hipsteeps, muchas otras empresas de
ecommerce tienen necesidades similares y se enfrentan al mismo problema,
¿cómo gestionar el crecimiento sin una estructura logística adecuada?
La solución
es sencilla: dropshipping. Los dropshippers son empresas que cubren
la problemática a la que se enfrenta el ecommerce, realizando todas las
funciones logísticas de estos negocios, desde la recepción de stock y de
pedidos, hasta la entrega al Courier. Estos operadores tienen una estructura
desarrollada, con almacenes automáticos de tamaño inmenso, y desarrolladísimos
programas de software que permiten el seguimiento de cada unidad de producto en
todas las fases del producto.
El
dropshipping tiene un gran número de ventajas para el crecimiento del negocio online. En primer lugar
permite a la empresa ahorrarse el coste en tiempo y recursos de organizar su
logística, y así poder enfocarse en la forma de desarrollar su negocio. Por
otra parte, la flexibilidad habitual de los
precios del dropshipping, permite ligar los costes del servicio que prestan al
crecimiento en ventas. Pero quizá la faceta más interesante del dropshipping y
que por ahora explotan muy pocos operadores, son las facilidades de
internacionalización que podría proporcionar un agente con presencia global.
Esto es, Miguel podría vender Hipsteeps allá donde su dropshipper tuviera
almacenes, aumentando así las posibilidades de crecimiento de la empresa.
En
conclusión, el comercio electrónico tiene una serie de necesidades específicas
que son difíciles de cubrir individualmente para cada empresa. En este contexto
han aparecido operadores altamente especializados en la logística de este tipo
de negocios, lo cual permite a las empresas
dedicarse exclusivamente de lo que mejor saben hacer, y aumentan las facilidades y oportunidades de
crecimiento.
José V. Guillamón Reverte
José V. Guillamón Reverte
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